En estos pasados días, como es de rigor en estas fechas, han proyectado en televisión Ben-Hur, la -para mí- espléndida película de William Wyler.
Es uno de esos largometrajes de los que casi todo el mundo reniega por las innumerables veces que lo han visto, pero al que la mayoría acaba sucumbiendo, bien total o parcialmente, pues es una película que vista por partes también se agradece.
Si alguno o alguna de los que lean estas líneas aún no la ha visto, le recomiendo que lo haga. Y a todos y a todas los que la han visto pero no han leído el libro, se lo recomiendo con más énfasis si cabe.
El relato de Lewis Wallace es un compendio de aventura, historia, leyenda, viajes… y un cuadro bien dibujado de caracteres. Un complemento ideal a la película. O viceversa.
Imagen de Lewis Wallace tomada de ANDINA.
Ben Hur
